Las primeras viñetas (X). Spider-Man

Con fecha de portada de diez de agosto de 1962 se repartía en los quioscos el número 15 de la varias veces renombrada revista Amazing Adventures. Por tercera vez la cabecera sería cambiada de nombre, esta vez por Amazing Fantasy, y reflejaría dos acontecimientos singulares: la cancelación del título y la aparición de un nuevo super-héroe que, junto a Hulk, El hombre hormiga, Iron Man, Thor o Los 4 Fantásticos, conformaría el inicio de la denominada Edad de plata de los comic-books americanos. El nuevo personaje se llamaría Spider-Man debido a las habilidades que este adquiriría tras ser picado por una araña.

La permisividad del editor Martin Goodman al dejar que la creación experimental de Stan Lee y Steve Dikto se publicase entre las páginas de una revista moribunda, hizo posible el nacimiento de un nuevo tipo de super-héroe juvenil que se alejaba de los estereotipos al uso, rompiendo la tendencia imperante de situar a cualquier personaje adolescente como compañero de un protagonista adulto. Spider-Man obtuvo de inmediato el reconocimiento de un amplio número de lectores que lo convirtieron en el super-héroe veinteañero más importante de la historia de los cómics.

El número 15 de Amazing Fantasy contaba con una portada de Jack Kirby, cuyos diseños para el personaje habían sido rechazados en favor de los de Dikto. La historia, dividida en dos partes, contaba con un total de once páginas donde se narraba el origen de Spider-Man y se asistía a la muerte del tío de Peter a manos de un ladrón que este último no había querido detener, dando lugar a una reflexión hoy día convertida en leyenda: Un gran poder conlleva una gran responsabilidad.

El final de la primera parte de aquella aventura nos presentaba a un Spider-Man ya enfundado en el característico uniforme que el propio Peter Parker se había confeccionado y que combinaba el color rojo, el azul y las figuras relativas a la araña repartidas por todo el traje, como las telarañas de brazos y pies o la propia figura del insecto en el pecho y en la espalda.