30 Nov 2010 2 comentarios
Viñetas para la historia (VI). The Spirit. Duelo mortal con Octopus
Con la intención de revitalizar al personaje que se vio obligado a abandonar cuando fue llamado a filas, Will Eisner comienza la escritura de unos guiones ciertamente innovadores para la serie The Spirit, tratando por una parte de dar continuidad a las distintas historias mediante la utilización de un nutrido elenco de personajes secundarios y por la otra de abarcar el mayor número de géneros posible para hacer el desarrollo del argumento mucho más rico e interesante. Haciendo uso de uno de esos personajes secundarios, el malvado Octopus, Eisner ejecutaría en tres entregas una de las historias mejor narradas de The Spirit a la vez que una de las más recordadas por el público en general, sobre todo cuando se produce el que parece será el enfrentamiento final entre el justiciero y el delincuente.
La historia comienza a publicarse un 10 de agosto de 1947 con una tenebrosa secuencia en la que Spirit es brutalmente apaleado por Octopus y uno de sus secuaces con la intención de sonsacarle el paradero de un dinero proveniente del robo a una sucursal bancaria. Gracias a la intervención de Ebony y el joven agente Klink, Spirit salva la vida y logra retener a Ghasher, el ayudante del villano. Tras un momento de calma en el que los colores oscuros dan paso a la claridad y la alegría de una merienda campestre, en la entrega publicada el 24 de agosto de 1947 vuelven de nuevo las sombras y la noche para acoger lo que se presagia desde la primera página como el enfrentamiento final entre Octopus y Spirit.
En cuatro páginas de intensa violencia los dos intérpretes luchan por su vida y se dirigen inexorablemente hacia un final que acabará con la existencia de uno de los contendientes. Will Eisner dibuja de forma magistral cada una de las viñetas que componen el desenlace, haciendo que el lector se sobresalte a cada paso que dan los dos protagonistas en unas escenas que se desarrollan entre la más absoluta oscuridad y la tenue luz de una noche casi cerrada. Spirit golpea al azar, los agentes de policía disparan al vacío y un Octopus malherido trata a tientas de escapar de la situación más complicada de su existencia. Al final, el estallido de una granada parece acabar con la vida del hombre que sólo enseñaba los guantes y que jamás mostró su rostro al lector. Spirit no recibe mejor suerte y queda completamente ciego, lo que dará lugar al desarrollo de una nueva trilogía donde la ceguera de su protagonista será lo más relevante de las historias que allí se terminarán contando.
Con la saga del enfrentamiento entre Octopus y Spirit, Will Eisner consiguió presentar al lector una historia épica que conseguía el propósito de la continuidad y profundizaba en el desarrollo de los personajes, a la vez que se experimentaban nuevos recursos narrativos que ayudarían a elevar sobremanera la calidad de las historias. Estas páginas son una muestra más de lo que supuso la innovación de un autor que en su día evolucionó el concepto de historieta y sentó las bases de lo que sería el futuro trabajo de cientos de autores que quedaron influidos para siempre con las aventuras de Denny Colt y los conceptos que su creador aplicó en cada uno de sus diseños.
La historia comienza a publicarse un 10 de agosto de 1947 con una tenebrosa secuencia en la que Spirit es brutalmente apaleado por Octopus y uno de sus secuaces con la intención de sonsacarle el paradero de un dinero proveniente del robo a una sucursal bancaria. Gracias a la intervención de Ebony y el joven agente Klink, Spirit salva la vida y logra retener a Ghasher, el ayudante del villano. Tras un momento de calma en el que los colores oscuros dan paso a la claridad y la alegría de una merienda campestre, en la entrega publicada el 24 de agosto de 1947 vuelven de nuevo las sombras y la noche para acoger lo que se presagia desde la primera página como el enfrentamiento final entre Octopus y Spirit.
En cuatro páginas de intensa violencia los dos intérpretes luchan por su vida y se dirigen inexorablemente hacia un final que acabará con la existencia de uno de los contendientes. Will Eisner dibuja de forma magistral cada una de las viñetas que componen el desenlace, haciendo que el lector se sobresalte a cada paso que dan los dos protagonistas en unas escenas que se desarrollan entre la más absoluta oscuridad y la tenue luz de una noche casi cerrada. Spirit golpea al azar, los agentes de policía disparan al vacío y un Octopus malherido trata a tientas de escapar de la situación más complicada de su existencia. Al final, el estallido de una granada parece acabar con la vida del hombre que sólo enseñaba los guantes y que jamás mostró su rostro al lector. Spirit no recibe mejor suerte y queda completamente ciego, lo que dará lugar al desarrollo de una nueva trilogía donde la ceguera de su protagonista será lo más relevante de las historias que allí se terminarán contando.
Con la saga del enfrentamiento entre Octopus y Spirit, Will Eisner consiguió presentar al lector una historia épica que conseguía el propósito de la continuidad y profundizaba en el desarrollo de los personajes, a la vez que se experimentaban nuevos recursos narrativos que ayudarían a elevar sobremanera la calidad de las historias. Estas páginas son una muestra más de lo que supuso la innovación de un autor que en su día evolucionó el concepto de historieta y sentó las bases de lo que sería el futuro trabajo de cientos de autores que quedaron influidos para siempre con las aventuras de Denny Colt y los conceptos que su creador aplicó en cada uno de sus diseños.
Jesús Duce
Dic 01, 2010 @ 05:48:20
Increíbles y memorables secuencias. Eisner está en un momento verdaderamente lúcido, de maestría absoluta.
MhBeyle
Dic 01, 2010 @ 11:56:38
Hola, Jesús. La serie The Spirit tiene momentos memorables que impusieron fórmulas muy innovadoras en la forma que hasta entonces se tenía de hacer cómics. Este es uno de los más notables, pero se comentarán muchos más a su debido tiempo.
¡Tanto que escribir y tampoco tiempo para hacerlo!!